Máxima custodia en la AMIA y objetivos israelíes por el conflicto entre Irán e Israel

Ante el agravamiento del conflicto bélico entre Israel e Irán, y el reciente apoyo del Gobierno argentino a los ataques realizados por Estados Unidos e Israel, la ciudad de Buenos Aires se encuentra en alerta máxima por prevención de atentados.
La Policía de la Ciudad de Buenos Aires reforzó la custodia en al menos 19 objetivos sensibles vinculados a la comunidad judía e intereses israelíes, como parte de un operativo especial en coordinación con la División de Despliegue de Intervenciones Rápidas (DIR).
Entre los principales puntos protegidos se encuentran:
- La sede de la AMIA
- La Embajada de Israel
- La residencia del embajador
- La residencia del agregado militar
- Instituciones educativas israelíes: desde jardines de infantes hasta escuelas primarias y secundarias
El operativo pone el foco especialmente en la protección de menores en entornos escolares, y contempla patrullajes preventivos, puestos fijos y efectivos desplegados de manera visible en cada uno de los puntos considerados de riesgo.
El contexto internacional y la posición del Gobierno argentino
El refuerzo de seguridad se da tras una serie de bombardeos ejecutados por Estados Unidos contra instalaciones nucleares iraníes durante el fin de semana. Las ciudades atacadas fueron Fordow, Natanz e Isfahán, consideradas clave en el programa atómico de Teherán.
El expresidente norteamericano Donald Trump celebró la ofensiva afirmando que “ningún otro ejército en el mundo podría haber hecho esto”. A su vez, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, elogió lo que llamó “una audaz decisión” y aseguró que “la paz se logra con la fuerza”.
En este marco, el gobierno argentino, encabezado por Javier Milei, emitió un comunicado donde manifestó su respaldo a los ataques y reafirmó su alineamiento con Estados Unidos e Israel:
“La Argentina está del lado correcto de la historia”, señalaron desde Casa Rosada, aludiendo a su alianza con los gobiernos de Trump y Netanyahu.
Las autoridades porteñas informaron que los refuerzos de seguridad continuarán activos mientras se evalúe el nivel de riesgo internacional, especialmente frente a posibles amenazas con antecedentes históricos como el atentado a la AMIA ocurrido en 1994.